Especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología y Miembro de la Junta Europea de Cirugía Ortopédica. Junto al resto de nuestro equipo realizamos la mayor parte de las cirugías, excepto cirugía de columna, especialmente
«Lesiones de traumatología en palabras de pacientes»
Esta web pretende ayudarte a comprender mejor la lesión que padeces y las posibilidades de tratamiento. Os resumo los conceptos clave de las patologías mas frecuentes que vemos los traumatólogos, y os explico las cirugías que llevamos a cabo y su recuperación a través de imágenes y videos . Comprender tu lesión y los tratamientos disponibles te va a ayudar a la hora de tomar la decisión mas correcta para tu caso concreto. Estos resúmenes , al igual que mucha información de internet, nunca pueden sustituir la opinión de tu especialista, el cual dispone de toda la información relevante a tu lesión. El contenido disponible en esta página esta elaborado íntegramente por un Cirujano Ortopédico y Traumatólogo (Juan Arnal), especializado en cirugía de rodilla, cirugía del deporte y cirugía de prótesis.
Hoy en día tratamos gran parte de las lesiones de rodilla por artroscopia, es decir, operando a través de una cámara de 3 mm. Mediante esta técnica operamos las roturas de menisco, las roturas de ligamento cruzado anterior y posterior, así como las lesiones del cartílago de la rodilla. Esta técnica permite una recuperación y vuelta al deporte mucho mas rápida que con la cirugía abierta.
Cada día se desarrollan mas técnicas de artroscopia de rodilla, sustituyendo a la cirugía clásica también para lesiones del deporte como la tendinopatia del rotuliano y del cuádriceps y la rodilla del corredor o síndrome de la cintilla iliotibial
Esta típica de fútbol es la lesión ligamentosa que mas frecuentemente operamos los cirujanos de rodilla. Esta lesión es típica de deportistas que habéis sufrido una caída o una rotación agresiva de la rodilla. Posteriormente la rodilla suele ser inestable, es decir, que falla bajo el peso corporal y sufre episodios de subluxación.
En la cirugía reconstruimos el ligamento con una plastia tendinosa de sustitución, habitualmente tendón rotuliano e isquio-tibiales, pudiendo utilizar los propios del paciente o tendones de cadáver. La recuperación de esta cirugía es una de las mas duras y que exigen mas participación por parte del paciente
La degeneración de la rodilla es uno de los problemas por el que mas nos consultáis a los traumatólogos, especialmente (aunque no exclusivamente) los adultos de mas edad. Esto es debido a que la rodilla es la articulación que con mas frecuencia sufre artrosis en nuestra sociedad, unido al dolor que esta lesión causa.
Hoy en día existen múltiples tratamientos, tanto para conservar el cartílago, entre ellos el ácido hialurónico y las células madre, hasta tratamientos definitivos: la sustitución total o parcial de la rodilla por una prótesis. Es importante realizar un tratamiento personalizado de la artrosis de rodilla, ya el estado de la rodilla y las características de cada paciente son distintas. Afortunadamente hoy en día disponemos de tratamientos que permiten a nuestros pacientes eliminar el dolor y llevar una vida activa incluso practicando deporte
La sustitución protésica de la rodilla ha mejorado mucho en los últimos años gracias al avance en las ciencias de materiales y a la mejora en las técnicas quirúrgicas. En los casos de artrosis avanzada la prótesis de rodilla devuelve al paciente la calidad de vida, con unos resultados excelentes en mas del 90% de los casos.
Hoy en día la duración de las prótesis es mucho mayor que con los modelos clásicos, que se recambiaban al cabo de los 15-20 años. Además permiten realizar una vida activa que incluye natación, bicicleta e incluso deportes de raqueta como el pádel, aunque en general os recomendamos cualquier deporte de bajo o medio impacto.
Después de la intervención se comienza a caminar el primer día y habitualmente en 3-4 semanas el paciente ya esta mucho mejor que antes de operarse, siendo esta recuperación mas rápida en las modernas prótesis unicompartimentales
Para tratar las úlceras del cartílago, roturas localizadas del cartílago u osteocondritis en pacientes jóvenes, disponemos de 5 técnicas de tratamiento alternativas a la prótesis en el caso de la rodilla y el tobillo. Utilizamos la artroscopia para tratar las lesiones del cartílago siempre que el tamaño de la lesión lo permite. Las técnicas que utilizamos buscan conseguir el crecimiento de nuevo cartílago por mecanismos naturales o de estimulación.
Depende del tamaño de la lesión realizaremos de menos a mas las siguientes técnicas: Condroplastia, Micro-Fracturas, Mosaicoplastia o transplante osteo-condral del propio paciente y el Mega-transplante de rodilla (del paciente o de cadáver). Estas técnicas tienen unos resultados muy favorables, mejores aún en combinación con técnicas biológicas: Factores de crecimiento y Células Madre Mesenquimales.
Los meniscos son estructuras fibro-cartilaginosas en forma de cuña con una doble función: Amortiguar el peso corporal en el interior de la rodilla actuando como almohadillas, y ayudar a los ligamentos a mantener las rodillas estables.
Su rotura o lesión puede tener dos causas que hay que diferenciar, las degenerativas y las traumáticas (roturas agudas en el deporte). Las degenerativas son parte del inicio de la artrosis de rodilla, mientras que las roturas agudas son típicas en deportes de nieve y deportes de pelota, en ocasiones acompañadas de lesiones ligamentosas. En general las roturas en la artrosis mejoran con el paso del tiempo, mientras que en las traumáticas indicamos habitualmente una artroscopia para evitar daños en el cartílago de la rodilla.
Siempre que se pueda intentamos conservar el menisco reparándolo mediante suturas intra-articulares, lo que no es posible en muchas ocasiones debido al poco potencial de cicatrización de estas estructuras. En los casos que no es posible realizamos la mínima resección hasta conseguir un menisco estable. Todas estas técnicas se realizan por cirugía artroscópica a través de dos o tres incisiones de 3 mm.
El atrapamiento del nervio mediano en la muñeca crea un calvario en los pacientes al impedir el descanso nocturno por el dolor y la sensación continua de tener los dedos dormidos. Es importante empezar de manera precoz con un tratamiento conservador para evitar el sufrimiento de este importante nervio, así como impedir el desarrollo de secuelas permanentes cómo la pérdida de fuerza en la mano. El tratamiento inicial se basa en utilizar una férula para dormir, fisioterapia y aplicar terapia anti-inflamatoria local (hielo y pomada).
En los casos graves de síndrome del túnel del carpo y en aquellos que no mejoran con el paso del tiempo realizamos una sencilla intervención quirúrgica. Nosotros realizamos la técnica guiada por ecografía, denominada ultra-mínimamente invasiva, que evita las incisiones clásicas y la cicatriz posterior. Con ello se consigue una recuperación en cuestión de días, con menos dolor post-operatorio y un resultado mas estético
El Juanete es la deformidad del antepié que mas frecuentemente vemos en consulta. En muchos casos es una herencia de nuestros antecesores (padres y abuelos)si bien la utilización de zapatos de tacón y de punta estrecha acelera su aparición, por lo cual el hallux valgus es mas frecuente en pacientes que utilizan este tipo de calzado.
Se puede vivir muchos años con esta deformidad y realizar una vida totalmente libre de dolor, pero en muchos pacientes con el paso del tiempo comienzan cambios inflamatorios y aparece el dolor del juanete. Habitualmente se combina con un dolor en la planta del pie, bajo la cabeza de los metatarianos (metatarsalgia) y con deformidad en los dedos; dedos en garra. Inicialmente se trata con sesiones de podología, férulas y plantillas, las cuales no van a corregir la deformidad pero alivian el dolor.
Si la molestia es muy intensa o lleva mucho tiempo de evolución la solución es una cirugía. En la mayor parte de los casos utilizamos lo conocido como cirugía “laser del pie”, es decir, sin incisiones. Se realiza en esencia lo mismo que con la cirugía abierta pero sin utilizar tornillos de fijación. Desde el día de la cirugía se puede caminar apoyando el pie operado con un zapato de ortopedia
La fascitis plantar es una de las causas de dolor en el talón (no la única) afectando tanto a corredores de fondo como a pacientes mas sedentarios. El dolor que causa es peor en los primeros pasos del día, al salir de la cama, y la sensación es como pisar una piedra continuamente.
El tratamiento inicial con automasaje, estiramiento y hielo va a conseguir quitar el dolor en casi el 90% de los casos, lamentablemente esta recuperación puede tardar incluso meses en llegar.
En los casos crónicos (mas de 6 meses) que no han obtenido mejoría con el tratamiento conservador y con infiltraciones, ofrecemos al paciente una pequeña intervención ambulante. Las dos técnicas que nosotros utilizamos (cirugía percutánea con control de rayos y cirugía guiada por eco sin incisiones) las elegimos en función del caso, de si hay espolón o si encontramos mucha fibrosis en la fascia plantar.
Si bien cada intervención en la rodilla va a tener unos plazos y unas restricciones concretas, todas tienen en común una serie de características. En un principio el dolor postoperatorio y la cicatrización pueden causar una pérdida del rango articular de movimiento por lo que la primera fase a trabar suele ser la movilidad.
Posteriormente veremos como los músculos de la pierna, especialmente el cuádriceps, pierden fuerza y volumen. Esta debilidad muscular aumenta las fuerzas en la rótula, lo que hace que en varias semanas tras la intervención os quejéis del dolor en la rótula, aunque en la intervención no se haya tocado la misma. Será por tanto importante realizar ejercicios de musculación de cadena cinética cerrada (menos presión en la rótula) para recuperar el estado muscular.
En esta sección os detallo las 5 fases completas de recuperación tras ser operado de la rodilla, ya que los objetivos son comunes tanto a una cirugía de menisco sencilla, como a reconstrucción múltiple en una lesión multi-ligamentosa de rodilla. Lo que variará serán los plazos y la intensidad de cada una de las fases.
Esta lesión es una inflamación en uno de los pequeños nervios que hay a cada uno de los lados de los dedos de los pies. Esa inflamación secundaria a procesos mecánicos acaba formando un bulto o tumoración que es lo que conocemos como Neuroma. Normalmente su formación es consecuencia de un problema mecánico, como una metatarsalgia (hiperapoyo de uno o mas metatarsianos) o una falta de espacio para el nervio bajo un ligamento engrosado que una los metatarsianos entre sí (el ligamento inter-metatarsal).
El dolor que produce el neuroma de Morton que va a dar va a ser de tipo neuropático o nervioso, es decir, quemazón o incluso calambres en los dedos y en el dorso del pie que mejoran al quitar el calzado. Su recuperación espontánea es menos frecuente que en otras lesiones, pero afortunadamente una pequeña intervención soluciona el problema en casi todos lo casos. Esta intervención variará en función de cada caso, desde una mínima apertura del ligamento sin incisiones bajo control ecográfico, hasta una corrección de la longitud o angulación de los metatarsianos en los casos de metatarsalgia.
El acceso al hombro a través de la artroscopia permite llegar a la articulación sin lesionar los múltiples músculos que la cubren. En lugar de hacer grandes incisiones, vamos a utilizar portales de alrededor de 4 mm para introducir la cámara y el material de trabajo con el que reparar tejidos como el labrum o los tendones rotadores del hombro.
La artroscopia en el hombro la utilizamos tanto para tratar los problemas del manguito rotador como problemas de los ligamentos:
– Tendinitis del supraespinoso
– Rotura del supraespinoso
– Bursitis subacromial
– Problemas de la porción larga del bíceps
– Tendinitis calcificante.
– Luxación de hombro
-Desinserción del Labrum
Muchas de estas lesiones tienen en común el intenso dolor que generan al paciente, no sólo durante el movimiento sino sobre todo en reposo, interfiriendo con el descanso nocturno. La técnica artroscópica permite tratar estas lesiones con el mínimo dolor después de la intervención y una rápida recuperación. Las pequeñas cicatrices de la cirugía apenas son visibles pasados unos meses.
A pesar de este nombre, en estas técnicas no utilizamos un laser como tal sino un instrumental basado en micro-fresas y material adaptado para operar las deformidades del antepié sin incisiones. En esta técnica nos guiamos para por la visión de rayos ya que no abrimos la piel, sino que operamos a través de unos puntos de entrada minúsculos. La utilizamos para trata lesiones frecuentes como el juanete , los dedos en garra, la fascitis plantar, el juanete de sastre y la metatarsalgia.
Durante la primera semana os colocamos un vendaje funcional que deberéis llevar junto con una zapato de suela plana post-quirúrgico. Os insistimos en que caminéis con normalidad desde el mismo día de la cirugía, ya que esto ayuda a dirigir la remodelación de los huesos corregidos. La recuperación con esta técnica es mas rápida que en la cirugía clásica con unos resultados funcionales iguales o mejores, siempre que podamos utilizarla, ya que para casos muy avanzados o grandes deformidades, la cirugía abierta sigue siendo necesaria.