¿Qué es la Rotura del Manguito de los Rotadores?
La rotura del manguito es el desgarro de uno de los tendones que forma el manguito rotador del hombro. Este manguito es un conjunto de 4 músculos situados debajo del músculo deltoides directamente sobre la articulación del hombro. Gracias a la acción de estos cuatro músculos y la baja congruencia articular que tiene, el hombro es la articulación mas móvil de todo el cuerpo. Los músculos que forman el manguito son el supraespinoso, el infraespinoso, el redondo menor y el subescapular, siendo el supraespinoso el que mas frecuentemente se lesiona y se rompe, seguido por el infraespinoso.
Estos desgarros tendinosos son muy frecuentes, de hecho, el supraespinoso es uno de los tendones mas frágiles del cuerpo, debido a lo mucho que lo usamos y la mala capacidad de cicatrización que tiene. Habitualmente antes de la rotura el paciente cuenta una historia de tendinitis y dolor de meses o años de evolución.
¿Qué causa la Rotura del Supraespinoso?
La causa mas frecuente del desgarro del supraespinoso es una combinación de tres factores:
– Espacio Subacromial Estrecho
– Sobreuso
– Edad
La rotura es la última fase del síndrome subacromial, en el cual existe un estrechamiento del espacio que hay entre la cabeza del húmero y el acromion. En este espacio (subacromial) se encuentran los tendones del manguito de los rotadores (principalmente el tendón supraespinoso) protegidos del hueso acromion por una bolsa para que deslicen: la bursa subacromial.
La disminución de este espacio esta causada por muchas causas, siendo la mas frecuente la constitución anatómica de tu hombro (acromion en forma de gancho, calcificación del ligamento cosaco-acromial..) a lo que si sumamos el movimiento repetido a lo largo de los años, va produciendo una rotura progresiva como consecuencia del choque entre el supraespinoso y el acromion. Por otra parte, este tendón a diferencia de otros del cuerpo tiene muy poca capacidad de auto-reparación ante los cambios degenerativos que sufre.
Además de este mecanismo lento de rotura existen también las roturas traumáticas, en las que el tendón se rompe tras una caída con el brazo extendido: rotura aguda del supraespinoso.
¿Cómo se Diagnostica una Rotura del Supraespinoso u otro Tendón del Manguito?
Tras meses de dolor en el hombro, el paciente puede contarnos una pérdida de fuerza o bien la incapacidad para levantar el brazo correctamente. Con estos síntomas y unas maniobras de exploración podemos sospechar ya la existencia de una rotura del manguito. Mediante la Ecografía o la Resonancia confirmaremos la rotura y veremos obtenemos además otros datos fundamentales:
1) Tendón o tendones afectados: Habitualmente el supraespinoso o el supraespinoso acompañado de infraespinoso o subescapular
2) Estado del tejido y de la rotura: Esta información es fundamental para decidir el tratamiento y si la rotura es “reparable”
3) Afectación de otras estructuras como el cartílago articular y el tendón largo del bíceps
Con toda esta información mas el tiempo de evolución y los síntomas propondremos al paciente un tratamiento conservador de la rotura (sin repararla) o una reparación quirúrgica por artroscopia.
¿Cómo es el Tratamiento No Quirúrgico de la Rotura del Manguito?
La filosofía de este tratamiento es recuperar la función del hombro (movilidad y fuerza) en la medida de lo posible prescindiendo del tendón roto. La tendón quedará roto pero intentaremos hipertrofiar, o aumentar el desarrollo del resto de músculos en la zona para acercarnos al estado que teníamos antes de que el músculo se rompiese. Para ello el tratamiento pasará por tres fases
1) Control de dolor inicial: Utilizaremos analgésicos incluso infiltraciones de corticoides para bajar la inflamación y el dolor. En estos casos de hecho nos da menos “reparo” infiltrar corticoides ya que el tendón ya esta roto
2) Recuperación de la movilidad: Evitar una fibrosis de la cápsula y un hombro congelado mediante técnicas de movilización en fisioterapia
3) Fortalecimiento del manguito: Es la fase mas importante. Seguiremos un programa de 6-12 semanas realizando ejercicios de fortalecimiento de manguito 5 días a la semana.
¿Cómo es la Cirugía de Reparación de la Rotura del Manguito? Artroscopia de hombro
En casos que decidimos a que debido a las características del paciente (activo y de buen estado general) y a las características de la rotura (buen tejido, poco acortamiento muscular) se puede mejorar con una reparación quirúrgica realizamos una artroscopia de hombro.
En esta intervención realizamos a la vez varios gestos quirúrgicos, todo ello a través de 2 o 3 pequeñas incisiones (menos de 1cm)
– Quitar la bursa inflamada: Bursectomia
– Limar el acromion engrosado para aumentar el espacio en los casos en que lo este: Acromioplastia
– Reparar la rotura: Sutura de Manguito
Esta reparación se realiza poniendo en el humero unos implantes (de titanio u otros materiales biocompatibles) a los que van unidos fuertes suturas resistentes a la tensión. En los casos de roturas parciales, muchas veces hay que completar la rotura para después volver a trasladar todo el tendón liberado a su lugar de inserción original, al que uniremos con uno de los arpones (implante). En el caso de roturas totales de uno o dos tendones utilizamos varios implantes para repararlos.
¿Cómo es la Recuperación tras la Artroscopia de Hombro?
La cirugía de reparación del manguito requiere un tiempo hasta que los tendones vuelven a cicatriza en el húmero, por ello os ponemos un cabestrillo durante dos o tres semanas que deberéis quitar varias veces al día para mover el codo. Durante este tiempo os prohibimos realizar rotaciones con el hombro para evitar que se desplace el tendón reparado mientras cicatriza. Durante este periodo os explicamos unos ejercicios de movilidad que debéis comenzar a realizar en casa durante las primeras 2 semanas. Una vez concluida esta fase y tras retirar los puntos, comenzáis con un programa de fisioterapia y musculación de manguito que se prolongará entre 1 y 3 meses en función de los casos. La vuelta al trabajo puede ser a partir de los 2 semanas para trabajo de oficina y a las 3 meses para los trabajos físicos.