Fracturas de Codo
Las fracturas de codo mas frecuentes en caidas en el deporte son las de olécranon y las de cabeza radial, seguidas por las fracturas de capitelum (húmero). Se pueden producir en casi cualquier deporte, tras una caída sobre el codo, o tras una caída sobre la mano con el brazo extendido, en las que la fuerza se transmite directamente a la articulación del codo.
En cualquiera de ellas habrá que intentar conseguir una movilidad precoz, ya que el codo es la articulación que mas rigidez hace, lo que conlleva una pérdida de movilidad que puede ser definitiva. Se pierde sobre todo extensión y prono-supinación; girar la palma de la mano hacia arriba y hacia abajo.
Fracturas del olecranon (Codo)
El olécranon es la parte del cúbito que forma el codo, en él inserta el potente músculo tríceps braquial. La acción del tríceps hace que estas fracturas suelan desplazarse por la tracción de este músculo y que casi siempre requieran de una cirugía para su tratamiento. Se pueden producir en casi cualquier deporte por caídas sobre la mano con el brazo extendido y una fuerte contracción del tríceps (mecanismos indirecto) o sobre un traumatismo directo en el codo (mecanismo directo). Os muestro el caso de una fractura de olécranon intervenida en un jugador de fútbol tras un mecanismo indirecto.
La fijación quirúrgica se hace con una pequeña incisión sobre el codo, utilizando en la mayor parte de los casos un sistema de tensión de alambres y agujas metálicas que denominamos cerclaje u obenque. Este mecanismo permite enviar al olécranon suaves compresiones que aceleran la curación de la fractura. Lo malo de este sistema es que durante los 3-4 meses que debemos llevarlo hasta que lo retiramos (en una segunda cirugía) suele molestar bastante en la piel del codo, al ser un hueso tan superficial. En los casos de fracturas muy fragmentadas por mecanismo directo, podemos necesitar una placa de olécranon para reconstruir el cúbito, siendo mucho menos frecuente. Hay que tener en cuenta que el codo es la articulación del cuerpo que mas rigidez (pérdida de movilidad) genera, y lo hace además de manera relativamente rápida. Es por ello que una movilidad precoz y una fisioterapia intensa es de vital importancia en cualquier fractura en esta articulación
Fractura de la cabeza Radial
Las fracturas de la cabeza radial son las segundas mas frecuentes en el codo. Casi siempre se producen por caídas sobre la palma de la mano en deportes de pelota (fútbol, boloncesto) y de raqueta (tenis o padel). En este mecanismo de caida sobre la palma de la mano, la fuerza se transmite a través del antebrazo hasta el codo y la cabeza del radio impacta contra el húmero creando una fuerza de compresión. Si la fuerza de la caida es muy alta, el codo puede incluso luxarse, siendo en este caso una lesión de mayor gravedad.
En las fracturas aisladas (sin luxación) el tratamiento va a depender de las características de la fractura. En fracturas con mínimo desplazamiento optamos por un tratamiento conservador (no quirúrgico) en el que dejamos mover el codo tras un breve periodo de inmovilización con una férula (2-10 días). Si no se produce una rigidez del codo, la cual la evitaremos con una movilización precoz, el resultado final es excelente. Por el contrario en fracturas desplazadas en las que un framento de la cabeza del radio puede dar complicaciones y bloquear el codo, decidimos fijar la fractura utilizando pequeñas placas de cabeza radial o tornillos de compresión sin cabeza. En la imagen os muestro el caso de un paciente de 32 años tratado con dos tornillos de bloqueo.
En los casos de fracturas de cabeza radial asociadas a luxación (tras caídas mas violentas), y en los casos de fracturas complejas, en los que no es posible reconstruir la forma anatómica de la cabeza del radio, sustituimos la cabeza por una prótesis. La recuperación de la cirugía es muy similar a la anterior, debiendo hacer hincapié en mover el codo de manera precoz, utilizando si fuese necesario una férula articulada para dar mayor estabilidad al codo.
Fractura del Capitelum
En el mismo mecanismo en que se producen las fracturas de la cabeza del radio (caidas con el brazo extendido sobre la mano) se pueden producir fracturas de la parte distal del húmero que articula con la cabeza del radio: El capitelum. Debido a su localización y función, muy similares a la cabeza del radio, su tratamiento será casi idéntico. Es decir, tratamiento conservador y movilidad precoz para las fracturas no desplazadas y fijación con tornillos o reconstrucción para aquellas fracturas desplazadas o anguladas. El objetivo de la cirugía será conseguir una fijación precoz que nos permita mover el codo desde casi el principio. Siguiendo estos principios se puede conseguir un resultado final excelente.
Fractura de Radio y Cúbito (Antebrazo)
Las fractura combinada de ambos huesos en la diáfisis o tercio medio ocurren casi siempre en el contexto de caídas violentas (esquí, rugby..) en los que el antebrazo se bloquea bajo el peso corporal. Son fracturas bastante graves, ya que estos dos huesos son fundamentales en el mecanismo de prono-supinación de la mano: Girar la palma hacia arriba y abajo sin mover la muñeca. Esto hace que debamos ser muy minuciosos al tratarlas (casi siempre con cirugía) reconstruyendo la anatomía normal del antebrazo en cuanto a su angulación, longitud y rotación, manteniendo la relación exacta entre ambos huesos. En la imagen os muestro el caso de un motorista que sufrió una fractura de ambos huesos tras caerse de la moto y apoyar de manera instintiva la mano en el asfalto.
Para la cirugía utilizamos dos placas preformadas, que aseguran la fijación de la fractura y la curación de ambas en la posición óptima. Este tratamiento va seguido de un tratamiento fisioterapeútico para recuperar la movilidad del codo y la muñeca, el cual es tan importante como la cirugía en sí.